Por Sin Reservas
El país se encuentra fuera de control desde hace décadas, pero hay que escribirlo como es, esto se empeoró durante estuvo en el Palacio Nacional el Cartel Medina-Montilla, quien corrompió todo lo que tocó.
Este, al que lamentablemente hay que llamarle «expresidente» se agenció la complicidad de los empresarios, ya sea con chantaje o haciendolos parte del entramado, principalmente a los agrupados en el Conep, así como la gran mayoría de los estamentos militares y policiales.
También tenía su Congreso, su Junta Central Electoral, su «justicia», en un momento su Tribunal Superior Eelctoral, que cuando le falló en contra, los dejó sin seguridad.
Pero lo más triste y repugnante tenía una Asociación de Malhechores, que se hacen llamar periodistas (los denominados bocinas), que son los que más daño le causaron al país, ocultando todas sus fechorías. Estos en su mayoría fueron comprados a través de lo más perverso que ha pasado por la comunicación del Palacio Nacional Roberto Rodríguez Marchena.
En el país nada sirve, y muestra de ello, es el reciente operativo denominado Operación Coral, donde la mayoría que han salido a relucir son generales de nuestra Fuerzas Armadas.
Entre todo lo pervertido por esta gavilla, se encuentra la competencia de una inoperante comisión, responsable de aplicar la Ley a los delincuentes que graban inmundicias y se atreven a llamarle «música». La Comisión Nacional de Espectaculos Públicos, dirigido por el miembro de la Asociación J.M. Hidalgo, que sólo sacó la cara cuando un maricón que tenía el farsante de Barack Obama, se pasó de rastrero y El Cocodrilo, se enfureció y le dijo lo merecido, entonces a este carajo lo mandaron a salirle al frente, para congraciarse con su colega, el delincuente estadounidense.
Esta inoperante comisión en camino a un año del Gobierno del Cambio, no ha usado la palanca y el libertinaje, la delincuencia auditiva-sónica siguen igualita.
Por eso esta señora, a diferencia de la que explotó tras los más recientes asesinatos del coronel Mariñez Lora, muy decentemente ha recurrido al que tiene que resolver, al que votamos el 5 de julio, para que aplique el Cambio, al Presidente de la República, Luis Abinader, y le hace el siguiente llamado en el vídeo que colocamos y transcribimos a continuación:
Distinguido y honorable señor presidente de la República Dominicana, Luis Abinader:
Le hacemos este vídeo haciéndole un llamado, a que usted haga algo, por favor.
A dónde van a llegar los «artistas» del género perreo con las «canciones»?.
Yo no sé, si usted se ha detenido a evaluar el contenido de las «canciones». Usted es un hombre que promueve los valores en su grado sumo, en grado superlativo, usted es un ser altamente honorable.
Las personas del barrio estamos sometidas a unas situaciones que talvéz usted no se imagina, porque no vive en esos estados que nosotros estamos.
Los vecinos son los que deciden que «música» que van a escuchar nuestros hijos, pero la «música» que se está poniendo, eso no se le puede llamar música, eso se llama desastre sonoro, eso se llama pornografía sónica, eso se llama instigación a la violencia acústica.
Esto es terrible, cuando una canción dice que: «no e’na matarlo, que luego e’pagarlo».
Vaya que lindo… que bien… que chévere…
Los niños cantando semejante atrocidad. Que no es nada matar una gente. Ah es que es una simple canción. Es que a las personas no se le puede coartar sus libertades.
Que libertades, ni libertades. Para eso es que están las normas y las leyes, para que haya paz. Para que haya bienestar social entre la gente.
Oh, y cómo se le va a permitir que la gente se le ocurra toda clase de barbaridad y la suelte por esa boca.
Que promueva la drogadicción, Que promueva el crimen, Que promueva la muerte, Que promueva la orgía, el desastre, el desenfreno sexual.desastre
Oh, pero y qué es lo que estamos promoviendo como autoridad?. Es qué nadie va a hacer nada con lo que se está haciendo?.
Pero esos «artistas» están generando conductas en los niños y en los adolescentes. Oh, pero yo quiero ver que ustedes entren al barrio, los que no están en ese ambiente para que ustedes vean lo que está ocurriendo.
O sea, tú compara unas canciones de otros tiempos con lo que se está viviendo en la actualidad, y tú dice, pero Dios mío, a dónde es que van a llegar?.
O sea, lo que asusta es: A dónde van a llegar?. Qué van a narrar después?. Qué es lo que van a narrar en las «canciones»?.
Cuando se le canse el morbo, de hacer tanta basura. A dónde van a apelar?.
O sea, De dónde van a sacar, para sacar más maldad y más cosas horrorosas.
Por qué si no se detienen ellos aquí, no se sabe donde se va a parar, señor presidente.
Así que le hacemos un llamado a su honorable conciencia. A que haga algo, por amor al Señor Jesucristo.
Que tristeza la de un padre, que se sienta con sus hijos a educarlos y a formarlos. Y ahí aparece esa bocina sin control, las autoridades no hacen nada.
Tú llama nadie viene, no te dejan ni dormir, y esa contaminación moral, que tiene esas «canciones», y así los niños escuchan todo eso, y eso les está dañando.
Los mismos «artistas» que graban esas «canciones» dicen que ellos no les ponen esa «música» a sus hijos, porque esa «música» es para adultos señor Abinader.
Oh, pero usted escucha que la «música» es para adultos, pero la escucha todo el mundo, por que hay un vecino que agarra y te pone tres y cuatro bocinas juntas, porque no se conforma con una, porque no se escucha bien, porque es una discolight, una discoteca que hay que ponerle frente a la casa.
Y tus derechos se vulneran, porque la «música» traspasa las fronteras. Oh, pero tú estás en tu casa y la «música» se entra a tu casa, no hay derecho.
Entonces ayudenos con esta situación. A la gente que tenemos valores y moral en la anción dominicana. Yo al iguel que usted, soy una ciudadana que ama la nación, que lucha por el bienestar de cada una de las personas que yo puedo contribuir, pero usted es la máxima autoridad de la nación.
Y si usted se propone cosas, usted la puede lograr, en el nombre del Señor Jesús.
Así que vamos para alante… No permita que esto siga aconteciendo.
*